Vasitos de Stracciatella con Crujiente de Caramelo Salado

Aprovechando que hoy ha sido el #diainternacionaldelamujer he querido aprovechar para publicar esta receta, y así con ella, dejaros un dulce sabor de boca.

Este postre de #stracciatella es de los preferidos de mis hijos y no es nada difícil de preparar. Eso si, debemos prepararlos con un poco de antelación porque al ser un semi frío debe estar por lo menos unas 2/3 horas en el congelador.

Ingredientes para el caramelo salado:

150gr, de azúcar blanca

20gr. de mantequilla

1 Cucharadita de sal

1/2 Cucharadita de bicarbonato

Elaboración del caramelo salado:

En una sartén pondremos a fuego medio el azúcar blanca y la cucharadita de sal.

Dejaremos derretir el azúcar hasta conseguir un color dorado.

Para ello iremos removiendo de vez en cuando para que se nos haga uniformemente por todos los lados. Una vez esté el caramelo derretido, incorporaremos la mantequilla, dejaremos derretir unos segundos sin parar de remover y apartaremos.

Aún caliente y recién apartado pondremos la 1/2 cucharadita de bicarbonato y removeremos con cuidado, hará unas pequeñas burbujas pero no os asustéis es normal.

Para finalizar, volcaremos toda la mezcla sobre un papel vegetal y dejaremos enfriar totalmente.

Una vez esté totalmente frío el caramelo, daremos unos golpes suaves sobre este hasta romperlo y hacerlos trocitos pequeños como pequeños cristalitos. Tal como se ve presentado en la primera imagen de la receta.

Reservaremos.

Ingredientes para la crema de stracciatella para 6 personas:

4oo gr. De nata con un 35% de M.G muy fría

80gr. De miel

90 gr. De chocolate con un 70% de cacao

3 Huevos medianos

1 Cucharadita de pasta de vainilla

Elaboración de la crema de stracciatella:

Lo primero que haremos será picar el chocolate hasta que nos quede en trocitos muy pequeños. Para ello en la Tmx daremos unos golpes de turbo con el vaso cerrado hasta conseguir la textura deseada. Reservaremos.

En el vaso de la Tmx o Kitchen Aid pondremos la nata con la miel y montaremos hasta que nos quede bien firme. Reservaremos en la nevera.

Limpiaremos muy bien el vaso y pondremos los huevos junto con la vainilla. Blanquearemos hasta que nos duplique o casi triplique su volumen y queden muy espumosos. Tal como se observa en la imagen de aquí abajo.

Una vez batidos los huevos, incorporaremos el chocolate troceado. Sacaremos la nata de la nevera y la incorporaremos a la mezcla de huevos y chocolate en tres veces, removiendo con una espátula de silicona con movimientos envolventes con el fin de que no se nos baje la mezcla.

Seguiremos removiendo hasta que tengamos en la mezcla bien integrados los ingredientes y para terminar pasaremos la mezcla a unos vasitos de postre.

Meteremos en el congelador unas 2/3 horas mínimo.

Cuando lo saquemos para servir, pondremos por encima unos trocitos crujientes del caramelo salado que preparamos al principio y que teníamos reservado.

También lo podremos terminar echándole unos trocitos de chocolate extra o rallarle un poco más tambien.

Como veis es un postre muy sencillo y a su vez super delicioso, gustará a pequeños y mayores seguro. Os dejo por aquí uno para que tengáis dulces sueños.

Bon Appétit!!